El dilema de los plásticos: dos minutos en tus manos, 150 años en el medio ambiente

La contaminación por plásticos es un problema global que afecta a todos los países del mundo. Según informes de las Naciones Unidas, cada año se producen alrededor de 400 millones de toneladas de plásticos, de las cuales el 90% no se recicla y termina en el medio ambiente. Es por eso que el lema de este año 2023 para conmemorar el día mundial del medio ambiente ha sido “Reducir la contaminación por plástico”, una llamada a la acción para concienciar a la población mundial sobre el impacto negativo del plástico en el medio ambiente.

Residuos plásticos esparcidos en la orilla de una playa

El plástico es un material sintético que se utiliza en una gran variedad de productos, desde botellas de agua hasta envases de alimentos. El problema es que a diferencia de otros materiales, el plástico no se biodegrada. Puede tardar cientos de años en descomponerse, por lo que, cuando se desecha, se acumula en el medio ambiente hasta alcanzar un punto crítico. Esta contaminación asfixia a la fauna marina, deteriora el suelo, envenena las aguas subterráneas y puede causar graves consecuencias para la salud humana.

 De hecho, según un informe de la ONU, se estima que para el año 2050 habrá más plástico que peces en los océanos.

Cómo la contaminación por plásticos afecta a la vida marina y los ecosistemas

La contaminación por plásticos es una amenaza para la vida marina y los ecosistemas acuáticos. Los animales marinos pueden confundir los residuos plásticos con alimentos y tragarlos, lo que puede causar obstrucciones intestinales y, en última instancia, la muerte.

Además, las redes de pesca abandonadas y otros residuos plásticos pueden enredarse en animales marinos y causar lesiones graves.

Los microplásticos: un enemigo invisible

Los microplásticos son pequeñas partículas de plástico que miden menos de 5 mm. Estas partículas se generan a partir de la degradación de productos de plástico más grandes o se agregan intencionalmente a productos de consumo, como productos para el cuidado personal. Los microplásticos son un enemigo invisible del medio ambiente, ya que pueden ser ingeridos por animales marinos y entrar en la cadena alimentaria.

La lucha contra la contaminación por plásticos: Los esfuerzos de la comunidad internacional

La comunidad internacional está trabajando para reducir la contaminación por plásticos a través de leyes y tratados mundiales. En la Quinta Asamblea Ambiental de las Naciones Unidas, los 195 países miembros acordaron finalizar la contaminación por plásticos negociando un tratado global jurídicamente vinculante que deberá estar listo a finales de 2024. Además, muchos países ya han adoptado medidas para reducir el consumo de plásticos de un solo uso y fomentar el reciclaje.

¿Qué puede hacer el ciudadano de a pie contra la contaminación por plásticos?

Los ciudadanos de a pie también pueden contribuir a reducir la contaminación por plásticos. Algunas medidas sencillas incluyen:

 Utilizar alternativas sostenibles, como envases reutilizables, botellas de agua de vidrio, bolsas de tela, entre otros.

Participar en campañas de limpieza del medio ambiente para recoger los residuos plásticos en las playas, ríos y otros lugares públicos.

Comprar productos que no contengan microplásticos, ya que estos son una fuente importante de contaminación en los océanos.

 Por lo que, la contaminación por plásticos al ser un problema global que afecta al medio ambiente y a la vida marina. Es importante concienciarse sobre el impacto negativo del plástico y tomar medidas para reducir su uso y fomentar el reciclaje. La comunidad internacional está tomando medidas para abordar la contaminación por plásticos, pero todos pueden contribuir a esta lucha.

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