La G de Guinea
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol Femenino (RFEF) y vicepresidente de la UEFA, Luis Rubiales, finalmente dimite 21 días después del escándalo ocurrido en la final del Mundial Femenino 2023 y tras ser denunciado por la jugadora Jennifer Hermoso ante la Fiscalía General del Estado.
Esta dimisión informada el domingo, mediante un comunicado en el que afirmaba que insistir en quedarse y aferrarse al cargo no va a contribuir en nada positivo. La misma decisión también ha cambiado el panorama del fútbol, tanto a nivel español, como a nivel internacional, pero para Rubiales la situación no cambia en gran sentido, teniendo en cuenta que ya estaba suspendido de manera temporal por la FIFA, la cual se iba a convertir en una medida más rigurosa en el futuro.
El expresidente de la RFEF, en su comunicado, no hace mención a la jugadora española Jenni Hermoso ni al beso que originó la polémica que, hasta el día de hoy, es noticia en el mundo entero. También se refirió a lo difícil que sería su vuelta como presidente de esta federación´ porque hay poderes fácticos que lo impedirían´.
Según la legislación española, los cargos por agresión sexual pueden conllevar una pena que comprende desde una multa a cuatro años de prisión. El Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) realizó una investigación antes de la renuncia de Luis Rubiales, donde se concluyó que el hecho acaecido en Sídney, el 20 de agosto de 2023, fue una falta grave por parte del líder de la federación de fútbol femenino.
Tras varias semanas de polémica por el “caso Hermoso”, Rubiales finalmente ha accedido a dejar definitivamente la presidencia de la RFEF después de transmitirlo al interino Pedro Rocha. El Consejo Superior de Deportes, liderado por Víctor Francos, considera que Rubiales ha hecho ´lo que tenía que hacer´, también ha pedido que se efectúen cambios significativos en la estructura de la federación.
El mandato del recién dimitido ha sido de cinco años y ha tenido muchas polémicas y grandes crisis desde su llegada, con su renuncia se pone fin a enemistades y “lealtades traicionadas”. A finales de agosto, estos conflictos crecieron considerablemente tras el beso no consentido recibido por Jenni Hermoso de parte del expresidente durante la entrega de premios a las jugadoras españolas como campeonas del mundo, edición 2023.
Su retirada del cargo da lugar a que se celebren unas elecciones en la Real Federación Española de Fútbol Femenino y elegir un nuevo dirigente hasta que finalice su mandato el próximo año, este es un punto que se recoge en el artículo 31.7 de los Estatutos de la RFEF.
En nuestra mesa de redacción también hemos podido saber que, el ya expresidente Luis Rubiales, no solo ha informado su dimisión mediante un comunicado, sino que también ha explicado con detalles los motivos por los que ha dejado su cargo mediante una entrevista con el periodista británico, Piers Morgan. ´Amo a mi país y el fútbol y no quiero dañarlos. Otra cosa es que estamos entre las candidaturas para organizar el Mundial de 2030. Hemos hecho un trabajo increíble en los últimos 5 años y medio´, matizaba.
Recordar que Rubiales, durante la Asamblea celebrada el 25 de agosto del año en curso, repitió, hasta en cinco ocasiones, que no iba a dimitir, además, acusó el caso de ´ falso feminismo´ y aseguró que el beso con Hermoso fue consentido y correspondido.
Son, de momento, 81 futbolistas españolas, entre ellas las ganadoras del Mundial, las que se habían pronunciado respecto al caso, asegurando que, con Luis Rubiales en el cargo, no volverían a jugar en la selección. Por tanto, lo esperado por muchos finalmente ha pasado, Rubiales ha dimitido y deja un alivio en la sociedad futbolística de España.
