La G de Guinea
Doña Constancia Mangue Nsue Okomo recibe la Medalla de la Orden del Camino de Santiago por su labor humanitaria y compromiso con las clases sociales más desfavorecidas.
La Orden del Camino de Santiago ha condecorado a Doña Constancia Mangue Nsue Okomo, Primera Dama de Guinea Ecuatorial, con la prestigiosa Medalla de la Orden. El acto tuvo lugar el miércoles 20 de noviembre en la Catedral Metropolitana de Malabo, durante una misa de acción de gracias oficiada por el sacerdote Juan Alo. Según ha avanzado la Oficina de Prensa de la Primera Dama.
A la ceremonia asistieron autoridades gubernamentales, miembros de la Fundación Constancia Mangue Nsue Okomo (FCMNO) y otros invitados. La condecoración reconoce las acciones humanitarias de la Primera Dama a través de la FCMNO, entidad fundada en 2020 con el propósito de mejorar la calidad de vida de las capas más desfavorecidas de la sociedad.
En su discurso de agradecimiento, Doña Constancia destacó que su labor filantrópica tiene como modelo el ejemplo de su madre, Doña Cándida Okomo Mba. “Mi madre, con su pasión desinteresada por ayudar a los más vulnerables, ha sido mi fuente de inspiración para llevar a cabo estas obras caritativas”, expresó emocionada la homenajeada.
Además, subrayó la misión de la FCMNO de promover la dignidad humana y mejorar aspectos esenciales como la educación y la convivencia en Guinea Ecuatorial, siguiendo los valores cristianos y sociales que también están ligados al legado de Santiago Apóstol.
Durante el acto, José Carlos de Santiago, Consejero por delegación del Canciller de la Orden Camino de Santiago, destacó el impacto social y religioso de esta histórica organización. Asimismo, invitó a la Primera Dama a participar en un evento en 2025, donde será investida como Dama de Honor de la Orden.
La invitación fue aceptada con entusiasmo por Doña Constancia, quien reafirmó su compromiso de trabajar por el bienestar de los más necesitados en Guinea Ecuatorial, vinculando su labor con los valores universales promovidos por la Orden.
El acto coincidió con el 35.º aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño y el Día Mundial de la Infancia, una fecha de especial relevancia para la Primera Dama, quien preside el Comité de los Derechos del Niño Ecuatoguineano. En este contexto, animó a los niños y jóvenes del país a centrarse en su educación, subrayando que el conocimiento es clave para construir un futuro mejor. “Este gran tesoro que nos pertenece a todos, la República de Guinea Ecuatorial, será más grande si nuestras generaciones más jóvenes estudian y trabajan con dedicación”, señaló.
El evento concluyó con una emotiva reflexión de la Primera Dama sobre la importancia de la fe y la acción cristiana en la búsqueda del bien común. Bajo la advocación de Nuestra Señora del Pilar, Doña Constancia destacó la necesidad de crear espacios de convivencia y espiritualidad que promuevan la felicidad y el bienestar de la población.
