La G de Guinea
El jefe de Estado de la República de Guinea Ecuatorial, OBIANG NGUEMA MBASOGO, pronunció un discurso en la reunión del Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana (UA), celebrada este viernes a través de videoconferencia.
El Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana, que aglutina los jefes de Estado y de Gobierno de todos los países africanos, mantuvo un nuevo encuentro para analizar la situación de la guerra civil de Sudán que estalló hace más de un año. Catorce meses tras el inicio de la guerra, los líderes de la Unión Africana demuestran que están comprometidos con la prevención de nuevas atrocidades contra civiles en el continente.
Durante la reunión mantenida por videoconferencia, el jefe de Estado, OBIANG NGUEMA MBASOGO, en su intervención, pronunció un discurso esperanzador y de tranquilidad. «Esta reunión en la que participamos hoy confirma nuestra convicción colectiva de la necesidad de abordar la cuestión de paz y seguridad que prevalece en la República de Sudán para encontrar una solución duradera que satisfaga a todas las partes concernidas; y Guinea Ecuatorial, como miembro del CPS y que, además, ejerce la presidencia de la Comunidad Económica de los Estados de África Central (CEEAC), está altamente preocupado por la situación que atraviesa Sudán, con frecuentes episodios de violencia e intentos de desestabilización.
Sudán es un país hermano muy importante para la Unión Africana; por tanto, debe primar la solidaridad africana para qué aunamos nuestros esfuerzos conjuntos con el propósito de establecer mecanismos tendentes a acabar con ese conflicto que durante varios años sufrió Sudán y recobrar la paz, la seguridad y la estabilidad política para poder avanzar hacia el camino del progreso y la prosperidad.
Es importante apreciar las iniciativas de la Unión Africana, sobre todo, la de silenciar las armas en el continente africano, aunque todavía seguimos muy lejos de alcanzar este objetivo para que África resulte más unida, pacífica e integradora».
Terminó reiterando la importancia de idear y recurrir a la resolución pacífica, priorizando siempre y, en todo momento, el diálogo inclusivo y la negociación como las únicas herramientas para promover la paz y acabar con esa situación que tanto daño hace a Sudán, en particular, y al Continente Africano, en general.
La batalla por el control de Sudán continúa, actualmente, las FAR siguen luchando contra el Ejército en la ciudad de Al Fasher, el último bastión gubernamental en Darfur, en el oeste de Sudán. Esta guerra se ha saldado al menos 30.000 muertos, según el Sindicato de Médicos sudanés, y ha provocado el desplazamiento interno y externo de más de 10 millones de personas, provocando la peor ola de desplazados del mundo en la actualidad.
