La G de Guinea
Los merecedores de este reconocimiento son aquellos maestros/as que han ejercido la labor docente durante diez años ininterrumpidos, destacados en la ética y conducta cívica ejemplar.
Dando cumplimiento al Decreto número 8/2003, de fecha 9 de diciembre, del estatuto de regulación de la labor docente, el 29 de junio de este año 2023, un dispositivo de docentes destacados por sus méritos en los distritos educativos de Malabo y Baney, recibieron sus reconocimientos por Mérito de Mejor Labor Docente; no solo por sus méritos académicos, sino por su comportamiento y ética demostrados en sus respectivas zonas de destino.
Para que un docente pueda ser merecedor de dicho título, las directivas de los centros establecieron evaluaciones continuas a modo de observación a docentes que llevaban diez o más años de ejercicio ininterrumpidos.
El acto realizado en la sala magna del Ministerio del Interior y Corporaciones Locales, comenzó con la intervención del representante de docentes, que es un personaje sobresaliente según el gobierno de Malabo, quien solo y únicamente agradeció a los miembros del sector educativo por el constante apoyo que brindan a la profesión docente nacional.
El inspector técnico de Baney por su parte, siguiendo artículo 138 y 139 en su inciso (a) recogió basado en la mejor labor docente durante diez años ininterrumpidos a 63 docentes seleccionados por el distrito de Baney, que llevaban tiempo anhelando este reconocimiento tras mucho tiempo de ejercicio salvaguardando la integridad educativa del país. De modo que, al llegar este momento, solo quedaba dar un agradecimiento común por haber hecho realidad el contenido de los artículos del estatuto de la profesión docente, cosa que refleja la práctica de la justicia social.
Por otro lado, el Inspector técnico de educación de Malabo, se refirió reflexionando «ha sido un esfuerzo incesante. Atender sin poder dormir a niños y niñas que, cada día, tienen ganas de aprender algo nuevo. En el distrito de Malabo han sido seleccionados 198 docentes merecedores de esta medalla. Sabemos que entre el dicho y el hecho hay un gran trecho. Hay leyes cuyo cumplimiento brilla por su ausencia, pero hoy en día se está materializando un inciso del ejercicio docente de Guinea Ecuatorial, lo cual el reconocimiento de la labor docente por excelencia. De modo que, todos los docentes aquí presentes deben seguir dando lo mejor de sí para construir un pueblo culto», declaró.
El gobernador de Malabo, León Eló ONDÓ NCHAMA, en su turno, habló sobre el pasado y el presente del ejercicio docente. «Se regula el estatuto de personal docente de Guinea Ecuatorial. Artículo 138, inciso (a) que establece que el gobernador otorgará un reconocimiento de Mejor Labor Docente, a aquellos maestros que ejerzan durante más de 10 años ininterrumpidos. Es por esta razón, tras los informes de los inspectores distritales de educación, me he visto obligado a proceder en entregar a los seleccionados, sus correspondientes medallas. Cada profesor o maestro cumplen con una gran exigencia en el ámbito del crecimiento de la sociedad», dijo.
Y continuó, «quisiera recordarles que, en antaño, los maestros eran personas paradigmáticas, sin embargo, hoy en día, los profesores dedican muchas horas de su vida enseñando, lo cual hace que el profesor sea visto como un segundo padre para el alumno. El maestro siempre ha sido identificado en la sociedad por sus modales cívicos. Y en la actualidad, esa imagen se está permitiendo, lo cual perjudica el honor del magisterio nacional, el acoso de las alumnas, el tráfico de notas y la impartición de las clases en estado de embriaguez», concluyó.
No obstante, el lado antagonista de ese acto fue cuando, después de la entrega de los títulos, algunos docentes, no titulares en la ocasión, revelaban a la prensa que «se exigió que todos los profesores pagarán una cuota 5000 francos por el título. Aquellos que no hemos cumplido con esa exigencia nos han dejado sin nada», señaló.
Contrariamente, el gobierno de Malabo se justificó considerando que «los 5000 no eran obligatorios, no era una condición para dar o negar el título a nadie. Simplemente que hicimos una revisión a las imprentas entre el diseño y la impresión de los títulos, y los costes eran elevados. Lo cual condujo a que se exigiera una contribución a los beneficiarios».
