La G de Guinea
En un giro inesperado, los integrantes de la Selección Nacional de Fútbol de Guinea Ecuatorial han emitido una carta abierta dirigida al Ministro de Juventud y Deportes, expresando su profundo descontento y frustración, por lo que describen como un trato insatisfactorio y falta de atención a sus necesidades básicas.
Los jugadores del Nzalang Nacional, incluidos nombres destacados como Emilio Nsue, Carlos Akapo y Jesús Owono, han señalado varias preocupaciones en su carta, arrojando luz sobre una serie de problemas que van desde condiciones inseguras en el estadio hasta la carencia de apoyo médico adecuado.
Una de las críticas más notables es el estado deficiente del Estadio de Malabo durante la última convocatoria en octubre, atribuyendo las lesiones graves de tres compañeros a la decisión de permitir un concierto dos días antes del partido. Esta denuncia ha llevado a cuestionar las prioridades del Ministro de Deportes, acusándolo de descuidar las necesidades básicas de la selección nacional.
El descontento se agrava con la solicitud de contar con un médico especializado en medicina deportiva, un elemento que los jugadores consideran crucial para su bienestar y rendimiento óptimo en el campo. Además, piden la designación de un delegado adjunto de confianza, identificando a Rubén Belima como la persona adecuada para este papel, con el objetivo de mejorar la logística del equipo en eventos europeos.
La carta también destaca la participación activa del Ministro en decisiones que, según los jugadores, deberían competir exclusivamente a la Federación. Se menciona la falta de mejoras a pesar de los esfuerzos de la Federación Ecuatoguineana de Fútbol (FEGUIFUT), atribuyendo la situación a la resistencia del Ministro a cualquier cambio significativo.
El cierre de la carta establece un ultimátum: los jugadores solicitaron una audiencia con el Ministro para discutir sus preocupaciones antes del 9 de noviembre. En caso de no obtener respuestas satisfactorias, amenazaron con hacer pública su situación y renunciar a representar al país en los próximos partidos clasificatorios para el Mundial de 2026, programados para el 13 de noviembre.
La situación ha generado un debate acalorado en el ámbito deportivo nacional, poniendo a prueba la capacidad del Ministro para abordar las inquietudes de los jugadores y mantener la estabilidad en un equipo que ha experimentado un éxito significativo en los últimos años.
A pesar de los inconvenientes que se han registrado en el seno de esta entidad, el éxito reciente de la selección nacional ha sido un punto de orgullo para el país, y la crisis actual amenaza con ensombrecer esos logros.
No obstante, la comunidad deportiva y la población, en general, esperan una pronta resolución que permita a los jugadores centrarse en su rendimiento y continúen obteniendo más éxitos, pero la forma en que se maneje esta situación podría influir en la percepción global de la estabilidad y la gestión del deporte en Guinea Ecuatorial.
